La deforestación,
el enemigo número 1
de nuestro planeta Tierra
La deforestación en el mundo es una práctica antigua que se ha venido incrementando durante los últimos tres siglos. Actualmente, La FAO (La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) define la deforestación como la conversión de los bosques a otro tipo de uso de la tierra (independientemente de si es inducido por humanos o no). En palabras más resumidas, esta es una práctica que reduce el material vegetal que disponemos en el planeta Tierra.
Hoy en día, los bosques cubren casi 1/3 de la tierra a nivel mundial, lo que representa 4.060 millones de hectáreas. De acuerdo al último reporte de la FAO, la proporción de la superficie forestal mundial se divide de la siguiente manera: el 45% pertenece a bosque tropical, el 27% a boreal, el 16% templado y el 11% a subtropical.
Pese a los diferentes esfuerzos que han realizado los gobiernos, ONGS y diferentes instituciones por reducir la deforestación, esta sigue siendo una amenaza constante para nuestra casa común. Durante los últimos años, América Latina, África Occidental y algunas regiones de Asia, son las zonas donde mayor presencia de deforestación hay.
¿Por qué se da
la deforestación?
Existen muchos motivos de la tala indiscriminada, sin embargo, la gran mayoría están relacionados con la ganadería y la agricultura; los agricultores, talan los bosques buscando cultivar o para el pastoreo de ganado. Este tipo de actividades claramente están relacionados con el fin de lucrarse o con fines de manutención familiar.
De acuerdo a la WWF, la agricultura comercial se identifica como una de las principales causas de deforestación y se encuentra detrás de la pérdida de bosques al rededor del mundo. Ahora bien, debemos aclarar que no siempre este fenómeno depende de factores humanos; existen eventos naturales como los incendios forestales, las tormentas, los tornados u otros que también pueden incurrir al aumento de esta problemática.
La deforestación
y el cambio climático
Para nadie es un secreto que estamos en medio de una crisis ambiental, y gran parte de ello es a causa de las actividades del ser humano, las mismas que han acelerado el cambio climático.
Ahora bien, todos sabemos que los árboles aportan múltiples beneficios para la humanidad; uno de los más importantes es su participación en la captura de CO₂, evitando así, su acumulación en la atmósfera y las altas temperatura en nuestro planeta.
Cada vez que un bosque es talado, estamos liberando nuevamente al ambiente todo el carbono que almacenó durante su periodo de vida. En algunos casos, cuando la madera es aprovechable, el CO₂ queda capturado en ella.
Pero lamentablemente, en la mayoría de los casos, los deforestadores dejan que la madera se empiece a malograr, ocasionando la generación de más gases.
Teniendo esto claro, es aquí donde la deforestación se ha convertido en una de las amenazas más temidas por gobiernos, entidades, instituciones u otros que combaten el cambio climático. Sin duda alguna, lo mejor que podemos hacer para combatir la contaminación en el planeta Tierra, es conservando y protegiendo nuestros bosques, además de:
1. Impulsa la siembra o el apadrinamiento de árboles
2. Recicla y compra productos reciclados
3. Usa muebles u objetos elaborados con madera proveniente de plantaciones comerciales
4. Las grandes compañías deben adoptar cadenas sustentables de suministro
Y tú, ¿Cómo le aportarás
al planeta?
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